CONSEJOS PARA EJERCITAR EN VERANO

El verano es el momento perfecto para comenzar hábitos saludables que duren toda la vida. Y la mejor forma de lograrlo es haciendo del ejercicio una práctica emocionante y divertida, para asegurarnos que no perderemos el interés y abandonaremos antes de obtener los resultados que deseamos.

Por eso compartiremos algunos consejos que nos animarán a hacer ejercicio en verano. Si sumamos estos pequeños hábitos, antes de que nos demos cuenta estaremos en forma y nos sentiremos fenomenal.

• Beber más agua 

Es importante beber mucha agua, especialmente en verano, cuando estamos más propensos a la deshidratación y sudamos más durante los entrenamientos. Una forma de añadirle sabor al agua, sin las calorías adicionales de otras bebidas, es agregarle trozos de nuestra fruta fresca favorita.

•  Conseguir un compañero de entrenamiento

Algunas de las mejores actividades para hacer con amigos son los paseos en bicicleta, las clases de baile al aire libre, y, por supuesto, salir a correr o ir de excursión al parque, el campo o la montaña ¡con un picnic saludable al final!

No solo disfrutaremos de la oportunidad de pasar un hermoso día al aire libre con un amigo, sino que al final del día ni nos daremos cuenta de la increíble sesión de ejercicios que realizamos. ¡Pero nuestro cuerpo sí lo notará!

•  Hacer ejercicio en la mañana

Hacer ejercicio de mañana es una gran manera de poner en marcha tu día, además de que así puedes evitar el sol alto del verano.

Si somos de los que nos cuesta despertarnos para partir al gimnasio, podemos intentar motivarnos a nosotros mismos, por ejemplo colocando un mensaje en un Post-it sobre las zapatillas deportivas, y dejarlas bien cerca de la cama. Una vez que incorpores la rutina, podrás seguir con ella en otoño e invierno.

•  Probemos el entrenamiento online

Hacer ejercicio a través de videos online es una de las mejores formas de hacer ejercicio, ¡sin ningún tipo de excusas! Todo lo que necesitamos es una computadora portátil y una conexión a Internet.

Podemos entrenar en el interior para disfrutar el aire acondicionado, o en el exterior si nos gusta el aire fresco y el sol.

•  Alimentarnos antes de entrenar

Los expertos aconsejan tomar una pequeña comida o merienda al menos 90 minutos antes de cualquier sesión de ejercicios para asegurarnos de que tenemos los mejores niveles de energía. Esto es especialmente importante cuando nuestro cuerpo está trabajando muy duro en el calor.

CAMBIO DE HABITOS ALIMENTICIOS EN VERANO

•  Limitar el aporte en materias grasas

Las vinagretas y salsas: suelen estar sobrecargadas de aceite. Seis cucharadas soperas de aceite equivale a seiscientas calorías, casi una comida entera. Dos  cucharadas soperas son suficientes –tres si la ensaladera es grande–, a las que puedes añadir una cucharada de agua, ya que da la impresión de que hay más aceite.

•  Otra forma de condimentar

Las hierbas, especias, cebollas, ajo, etc., pueden muy bien reemplazar la sal –debemos tener en cuenta que la sal abre el apetito, por lo que siempre es ideal probar el plato primero antes de volver a sazonar–. Finalmente, se mezcla bien la ensalada para evitar que la vinagreta no se quede en el fondo del recipiente.

•  Consumo de proteínas

Comprobar las porciones de carne y de pescado: 120 Gs de proteínas por persona es una buena cantidad. Se pueden añadir legumbres, lentejas, garbanzos a las ensaladas frías. Las fibras, ralentizan la asimilación de los azúcares y se transforman en energía sin provocar el famoso pico de insulina propicio para el almacenamiento.

•  Consumir más frutas y verduras

Consumir frutas y verduras en cantidad es imprescindible para mantener una buena salud. Como el sol afina los sentidos, nos sentimos tentados de variar la alimentación, las papilas se abren a los sabores más sencillos y todo parece mejor. Los alimentos ricos en vitaminas, minerales y fibras tienen una buena densidad nutricional.